La floricultura en Colombia es reconocida mundialmente por la calidad, belleza y diversidad de sus flores, especialmente las rosas, claveles y crisantemos. Sin embargo, uno de los mayores desafíos para los floricultores colombianos es el hongo Botrytis cinerea, una enfermedad que afecta gravemente la producción, reduce la vida útil de la flor y genera importantes pérdidas económicas. Afortunadamente, la luz ultravioleta (UV) se ha convertido en una solución innovadora y efectiva para prevenir y controlar este problema.
¿Qué es el hongo Botrytis y por qué afecta a los floricultores?
El hongo Botrytis cinerea es un patógeno que prospera en ambientes húmedos y con poca ventilación, características comunes en invernaderos y centros de almacenamiento de flores. Este hongo provoca el conocido “moho gris” en pétalos, tallos y hojas, afectando directamente la estética y calidad del producto final.
Entre los principales efectos negativos para los floricultores están:
- Pérdida de cultivos antes de la cosecha.
- Disminución de la calidad y presentación de las flores para exportación.
- Acortamiento de la vida útil en la cadena de distribución.
- Incremento en los costos de producción por tratamientos químicos.
Impacto en la exportación de flores colombianas
Colombia es el segundo exportador de flores más grande del mundo, enviando productos a Estados Unidos, Europa y Asia. Cuando las flores llegan con presencia de Botrytis, los compradores internacionales pueden rechazar la mercancía, generando pérdidas económicas y afectando la reputación del productor.
La luz ultravioleta como aliada contra Botrytis
La luz ultravioleta (UV-C) es una tecnología de desinfección que inactiva hongos, bacterias y otros microorganismos dañinos sin el uso de químicos. Su acción consiste en destruir el ADN de las esporas de Botrytis, impidiendo que se reproduzcan y se extiendan en los cultivos y flores cortadas.
Ventajas de usar luz UV en floricultura
- Prevención y eliminación: Actúa tanto de forma preventiva como correctiva.
- Prolonga la vida útil: Mantiene las flores frescas por más tiempo durante transporte y almacenamiento.
- Libre de químicos: Evita residuos nocivos y cumple con las exigencias de exportación.
- Protección 24/7: Puede aplicarse en diferentes etapas: cultivo, postcosecha y transporte.
Aplicaciones de la luz ultravioleta para floricultores
1. En invernaderos
La instalación de equipos de luz UV-C en los sistemas de ventilación o en puntos estratégicos del invernadero ayuda a reducir la carga microbiana en el aire, evitando que las esporas de Botrytis se depositen sobre las flores.
2. En salas de postcosecha
Antes de empacar las flores para exportación, un tratamiento rápido con luz UV-C en cámaras de desinfección elimina esporas presentes en pétalos y tallos, asegurando que el producto llegue en condiciones óptimas.
3. Durante el transporte
En contenedores refrigerados o vehículos de distribución, la luz ultravioleta mantiene el ambiente libre de contaminantes, prolongando la frescura de las flores hasta su destino final.
Resultados comprobados en la industria floral
Estudios en cultivos de flores cortadas han demostrado que la aplicación de luz ultravioleta reduce significativamente la incidencia de Botrytis, mejora la apariencia del producto y prolonga su vida útil hasta en un 40%. Esto no solo protege la inversión del floricultor, sino que también fortalece la competitividad de las exportaciones colombianas en mercados exigentes.
Innovación para proteger la floricultura colombiana
El hongo Botrytis seguirá siendo una amenaza constante para los floricultores, pero con tecnologías limpias como la luz UV-C, es posible prevenir pérdidas, reducir el uso de químicos y garantizar flores de calidad premium para el mercado internacional.
La adopción de sistemas de desinfección ultravioleta es una inversión estratégica que protege los cultivos, cuida la reputación de los exportadores y asegura que las flores colombianas sigan conquistando el mundo con su belleza y frescura.
